Con motivo del reciente cumpleaños de la localidad de Fortín Acha; hemos considerado oportuno rendirle homenaje a este feliz acontecimiento, rescatando detalles de su distinguida historia.

FORTIN ACHA / UN POCO DE SU LARGA HISTORIA, por Juan Carlos Cambursano
Si bien se ha determinado que el 8 de febrero de 1911 es la fecha de fundación de la localidad de Fortín Acha; día en que quedó habilitada oficialmente la estación De Bruyn del entonces Ferrocarril de la Compañía General Buenos Aires (F.C.C.G.B.A), después devenido en Ferrocarril General Belgrano, en el trayecto Vedia-Pergamino, existe una larga historia previa que se remonta a la segunda década del siglo XIX, a escasos dieciséis años de la Revolución de Mayo y a solo once de la Declaración de la Independencia de nuestra patria el 9 de julio de 1816.

Allá por el año 1827, la línea de fortines o guardia de fronteras en esta región de la actual Provincia de Buenos Aires, llegaba hasta lo que hoy en día son las ciudades de Mercedes (Guardia de Luján) Salto (Fuerte del Salto), Rojas (Guardias de Rojas), Colón (Fortín Mercedes) y Melincué, ya en tierras ahora santafecinos; en el mes de agosto de ese año es designado Comandante General de Fronteras Juan Manuel de Rosas, quien cumpliendo órdenes gubernamentales dispone avanzar tierra adentro, en el territorio dominado por los indios ranqueles asentando nuevos fortines, extendiendo la frontera preexistente..

Las órdenes se las transmite al Coronel Federico Rauch, autoridad máxima del Fuerte del Salto, pero este aduciendo problemas de salud, delega en el Comandante José B.B. Escribano la instalación del Fuerte Federación, hoy ciudad de Junín, lo que se hace efectivo el 27 de diciembre de ese 1927. También y casi simultáneamente comisionó al Teniente de Húsares Mariano de Acha para establecer otro punto de avanzada en la zona norte de esa región. Con atino este militar elige un médano alto, en la margen sur de una pequeña laguna de agua dulce para erguir este nuevo Fortín; que se identificaría como “Fortín del Médano”, luego llamado “Del Médano de Acha” y que se hallaba emplazado a cinco kilómetros de lo que hoy es el casco urbano de Fortín Acha.

Mariano de Acha

Si bien el fortín instalado por Acha era de mucha menor magnitud que el Fuerte Federación, que ya había quedado establecido como un asentamiento poblacional de magnitud, cumplió eficazmente con el rol previsto, esencialmente por su estrategia
ubicación, siendo el punto de partida de numerosas expediciones en territorio indígena; entre ellas por ejemplo, el 13 de enero de 1938 la encabezada por el Comandante de Frontera Norte Coronel Emilio Mitre con fuerzas de la Guardia de Rojas y del Fuerte Cruz de Guerra (25 de Mayo) sumando 2000 efectivos, que marcharon a Trenel –La Pampa- para combatir al Cacique Painé Gner.
El Fortín del Médano, por muchos fue el punto extremo, la línea norte más avanzada de esta línea de frontera; recién en 1864 el Coronel Martiniano Charras establece el Fortín Chañar, actual Teodelina y en 1869 instala el Fuerte Lavalle, también conocido como Ancaloo Grande, hoy General Pinto; para concretar esta última fundación el Coronel Charras con sus milicias tienen punto de partida en el Fortín del Medano de Acha.

En el año 1867 el Sr. Pedro Henestrosa obtiene cuatro leguas de campos del estado ubicado en las inmediaciones del Fortín del Médano; tiempo después serían establecimientos agrícola ganaderos propiedad de Bernardo y José Suárez, “La Igualdad”, “Los Médanos”, “Basterreix” y “Fortín Acha”.
Hacia finales de la década de 1880 la función de los fortines en la "lucha contra el indio" se volvió obsoleta. Muchos fortines originaron luego ciudades, por ejemplo, Junín, Salto, Rojas, General Pinto, Tandil, Bahía Blanca, Chascomús, San Antonio de Areco, Lobos, Navarro, Monte, Ranchos, Banderaló, y otras en distintas provincias argentinas, en el caso del Fortín del Médano por no haberse conformado un asentamiento nutrido de familias en el mismo fuerte y en sus adyacencias, y por su ubicación alejada de caminos transitados, en una fecha indeterminada, es totalmente desmantelado, no quedando prácticamente rastros del mismos; aunque, excavaciones realizadas en su lugar de emplazamiento han permitido en los últimos años rescatar objetos y restos de elementos, de aquellos años ya muy lejanos.

(Continuará).