«Son varios los factores del aumento. El principal problema son las altas temperaturas, esto hace que las gallinas bajen las posturas. El 60% de la producción en Argentina es de granjas tradicionales, pero las grandes empresas también han llegado a tener este problema».
«Por otro lado, está el aumento del alimento para ponedoras, porque con el dólar soja aumenta el precio de la soja para consumo interno lo que impacta en un 20 a 30% de aumento en los alimentos».
«Otro factor es la tarifa de la luz, recordemos que en estos meses ha sido liberada y las granjas a eso lo sienten mucho por lo que la inflación le ha pegado a nuestro sector más que a otros».
«Además el aumento de la carne arrastra a los demás alimentos proteicos hacia el aumento. A esto le agregamos las relaciones comerciales entre países como Argentina, Estados Unidos y México, donde nosotros somos exportadores hacia estos países y la demanda aumentó, por lo que granjas grandes, incluso las de nuestro medio, están vendiendo menos en la zona, seguramente por exportación y a nivel macro esto se nota».
«Por su parte, no es de ahora pero se viene observando que se consume más huevos, porque el huevo hoy se lo ve, además de rico, como una fuente de proteínas naturales, porque usted verá que se lo incluyó en las dietas cuando hasta hace poco no era así, aumentando así su consumo en los últimos 5 a 6 años».
«Para finalizar, también tenemos otros aumentos indirectos que se suman, como el aumento de la logística por ejemplo (combustible, etc)», cerró Illuminatti.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.