HISTORIA DEL FINAL

no hay un pasado

sino una multitud

de muertos

–

no hay incas ni virreyes

ni grandes capitanes

sino un ciento

de amarillos papeles

y un poquito de tierra

–

un señor hubo y decía

a sus esclavos “el oro es bueno

y Dios está en el cielo”

–

un general hubo y decía

a quien le oyera

mato porque me pagan

y no sé lo que es cielo

–

pero ésta no es una historia

sino veinte palabras

que nada dicen.

Ovidio

LA PATRIA

calientes clavos le clavaron y

siguen clavándole esos clavos en los ojos ardientes

aunque sigue mirando

morena

mutilada

revoltosa

y sangrante

velando por los hijos (esas sombras anónimas

que la siguen llevando) por los hijos

a quienes por llevarla les clavaron

con esos mismos clavos

calientes con que fueron a clavarles los ojos

revoltosos y ardientes

con que sigue

MIRANDO

Ovidio