Carlos «Charly» Ferraris es el menor de cuatro hermanos y tuvo que trabajar desde su adolescencia para aportar a la economía del hogar cuando la familia perdió a su padre. Terminado el secundario, salió a la ruta desde su Juan Bautista Alberdi natal y a dedo llegó a la localidad vecina de Lincoln, donde realizó el profesorado de Educación Física. Al volver trabajó en escuelas y colonias de verano, pero no conforme con eso en 2005 decidió seguir su capacitación en Rosario, donde se recibió de Licenciado en Educación. En su regreso definitivo al partido de Leandro N. Alem, en 2019, con el apoyo de su familia, esposa, dos hijos y una beba en camino, fue elegido Intendente.

Ferraris se integró a la militancia kirchnerista en gran parte por el recuerdo de las conversaciones en la sobremesa familiar en las que su padre renegaba por la entrega de las empresas nacionales como Aerolíneas Argentinas, YPF, Entel y las rutas. «Esas charlas me quedaron muy marcadas y en ese momento dije que ojalá algún día aparezca un gobierno que recupere todo y le vuelva a poner la bandera nacional. Cuando llegó Néstor Kirchner, sentí que representaba todo lo que esperaba», contó Charly a Noticias d.

A partir de ahí, empezó el compromiso de trabajar fuertemente en el plano distrital, «siempre siguiendo con gran satisfacción los desafíos y las decisiones tomadas por el gobierno nacional», según rememoró el jefe comunal, quien se desempeñó durante años en distintas áreas del municipio. La carrera hasta el Ejecutivo local comenzó desde abajo en las listas al Concejo Deliberante hasta diciembre pasado, cuando el ex intendente Alberto Conocchiari ganó su banca de diputado provincial y Ferraris la Intendencia, con casi el 60% de los votos, en la lista junto al gobernador Axel Kicillof y el presidente Alberto Fernández.

Comienzo con pandemia

A los pocos meses de iniciar su gestión se topó con la pandemia del Covid-19, que al momento tiene 95 casos activos entre todas las localidades del distrito: «Arrancamos con todas las ganas e iniciativas en todos los frentes que duraron hasta marzo. A partir de ahí, no dejamos de tomar medidas siempre sujetas a la cuarentena. Cerramos todos los caminos alternativos, dejamos solo un acceso a la localidad y pusimos controles las 24 horas en el ingreso y egreso. Aguantamos la difícil situación de decirle a la gente ‘usted no puede trabajar’, pero le dimos la vuelta para encontrar el equilibrio».

El Intendente relató que cerraron todos los espacios públicos y que realizaron una inversión de más de diez millones de pesos en insumos sanitarios y refacciones hospitalarias para el buen manejo de las personas afectadas por el coronavirus: «Si bien el Hospital Municipal de Vedia contaba con una terapia intensiva con cuatro respiradores, gestionamos a través del Gobernador que se pudieran incorporar otros tres, lo que le ha dado un salto de calidad a la capacidad de albergar más pacientes. Hicimos una fuerte inversión en salud y vamos a comprar una torre nueva para tener servicio de endoscopia y laparoscopia absolutamente gratis para los vecinos».

La economía no para

Ferraris aseguró que la economía local, al estar basada sobre todo en la agricultura y el propio municipio, pudo sostenerse durante el aislamiento social preventivo y obligatorio, y que incluso los sectores más vulnerables encontraron amparo en las medidas del Estado Nacional, como el Ingreso Familiar de Emergencia, la tarjeta Alimentar y la Asignación Universal por Hijo. Además, la municipalidad se encargó de brindar entre 3 mil y 4 mil kilos de carne para jubilados y la población que por el parate en el trabajo necesitó ayuda alimentaria.

«Esto es día a día, hace unas semanas estábamos contentos porque teníamos dos casos activos y me pedían a gritos que abriera y habilitara todos los espacios y dijimos no, esperemos. Y bueno, luego empezó a crecer de vuelta la curva. Siempre mantuvimos la coherencia, primero la salud y después fuimos equilibrando lo económico, y las habilitaciones fueron relacionadas a lo laboral”, expresó el jefe comunal y el tiempo le dio la razón: A pesar de los controles, los contagios subieron y Leandro N. Alem volvió a fase 3 desde esta semana.

Sin embargo, el trabajo de gestión no se detuvo. «En el medio de la pandemia pudimos hacer pavimento, obras de cordón cuneta y llegar al primer cemento en calles que eran totalmente de tierra. Eso mejoró el tema inundaciones y sin cobrarle nada al vecino. Acabamos de firmar con el Fondo de Infraestructura Municipal obras de iluminación para todas las localidades», afirmó Ferraris y explicó que las mejoras estuvieron también en el ámbito educativo con el arreglo de aulas, en el deporte con el piso flotante del gimnasio municipal y el inicio del nuevo techo, y en la construcción de un destacamento policial en Colonia Alberdi.

Un partido en pleno crecimiento

En materia de servicios, el Intendente aseguró que el Partido «viene creciendo muchísimo» y que tienen en carpeta la terminación del megaestadio municipal, que «está en un 77% terminado y cuenta con tribuna, dormis y gimnasio propio». Asimismo la municipalidad mantiene las 600 becas para estudiantes, que en el contexto de la pandemia sirvieron para garantizar la conectividad de los chicos y chicas para no perder la regularidad pedagógica.

Ferraris también se explayó sobre la situación de las quintas y tierras que bordean el casco urbano y la situación medioambiental que las aqueja: «Hoy tenemos una lucha con las fumigaciones porque nuestras ciudades están rodeadas de campo, entonces hay una zona donde seguimos prohibiendo que fumiguen, para cuidar la salud de los vecinos. Eso hace que las quintas pegadas a las localidades tengan que cambiar la manera de pensar. Entonces ahí entra a jugar la agroecología».

«Queremos fomentar la iniciativa de huertas para producir todo lo que consumimos en nuestras localidades. Hoy, por dar un ejemplo, el tomate y lechuga que se come acá a lo mejor viene del Mercado Central de Buenos Aires, cuando nosotros estamos rodeados de una tierra tan rica», agregó en diálogo con Noticias d. En ese sentido, el municipio lanzó un vivero municipal y está fomentando emprendimientos de verduras, pollo, huevos y plantas.

Para finalizar, el Intendente resaltó las características por las cuales Leandro N. Alem es un gran distrito para vivir: «Aquí ya no está esa vieja idea de ese interior lejano, profundo y desconectado. En 4 horas podés estar en Capital, hay conectividad, servicios, educación y salud pública garantizadas y, sobre todo, calidad de vida. Acá los chicos van en bicicleta a la escuela, juegan en la vereda o en nuestros polideportivos y piletas públicas gratis, todo el verano. No venís al medio del campo, venís a un distrito bien plantado que quiere seguir creciendo»..