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Lo visto en la última Sesión Ordinaria del Honorable Concejo Deliberante del Partido de Leandro N. Alem, realizada el pasado jueves 6 de agosto de 2020, volvió a ser lo que era.
Un reducto de politiquería barata y PARTIDARIA. Volvió a ayudar y a acrecentar los motivos por los cuales la gente de a pie, descrea y cada vez más de la política.
La gente común está cada vez menos representada (por más palabras bonitas que usen ciertos ediles rasgándose las vestiduras hablando de su honorable trabajo).
El votante común ya a esta altura se estaría preguntando, para qué realizan ciertas sesiones, si no les resuelven casi ningún tipo de problemas y encima observan como discuten (y a veces hasta se faltan el respeto) bizarramente.
Pero vamos a empezar por el final esta crónica. Y para entender ese final, luego nos remitiremos al principio.
Una vez terminados los 16 puntos a tratar y cuando ya finalizaba la sesión, el secretario del cuerpo legislativo, el señor Alberto Rotelli, presento sobre tablas, un proyecto de resolución enviado por el Departamento Ejecutivo Municipal (DEM), adhiriendo y celebrando el acuerdo del gobierno nacional con los bonistas extranjeros, acreedores de deuda argentina, en pocas palabras, el acuerdo de la reestructuración de la deuda externa (extremadamente IMPORTANTE para el país, pero no de URGENCIA para el ciudadano del distrito). Una vez leída dicha resolución, los concejales de Juntos por el Cambio (oposición), se levantaron del recinto y se retiraron, ante el asombro de los ediles oficialistas. Ediles que repudiaron mediante todas sus voces esta actitud y argumentaron que era una falta de respeto a la insignia patria, y que ese recinto era el lugar para discutir políticamente.
Ahora bien, si nos remitimos a esta actitud, sería muy cuestionable lo hecho por los concejales opositores, pero de alguna forma entendible, de acuerdo a lo vivido y tratado esa tarde dentro del recinto. Ya de antemano, el acuerdo arreglado por TODO el cuerpo legislativo local y debido a la pandemia que estamos viviendo y por consecuencia la cuarentena establecida, es que solamente se tratarían asuntos entrados sobre tablas, si los mismos provenían del Intendente y si eran TEMAS DE URGENCIA. Por lo que al oír el discurso de política, y de una fuerte crítica a la gestión de Mauricio Macri, los concejales opositores no lo entendieron así, y menos después de los temas rechazados anteriormente, y que sí serian de mucho más importancia (obviamente hablando del ámbito local y de los problemas de nuestra gente) como la puesta en funcionamiento del Bus municipal, pedido por el concejal Gómez hace unos meses atrás y rechazado como proyecto; pero 3 meses más tarde implementado. O un proyecto reciente para abordar el tema de la vuelta al colegio de aquellos alumnos con vulnerabilidad, también presentado por Juntos por el Cambio y rechazado en la sesión de Julio, y presentado con maquillajes por el bloque kirchnerista y aprobado por mayoría automática 21 días después. “Como decía el empresario Yabrán, el poder te da impunidad”, y algo así se percibe en el aire, un grupo que por ser más numeroso, somete a la minoría por el hecho de ser más numeroso. Pero en el medio estamos nosotros, con nuestros padres e hijos como rehenes de 12 concejales que no se ponen de acuerdo para empujar juntos el carro.
O nosotros no entendemos nada o ellos van en contramano.
Y refiriéndonos a esto tenemos que volver a decir, que en cuanto a temas importantes para la gente de nuestro distrito, estamos parados sí sobre un tema de politiquería barata y excesivamente partidaria. Si dichos proyectos provienen del bloque kirchnerista que tiene mayoría en el recinto, ya sea por unanimidad o con la negativa del bloque opositor, son aprobados o en algún caso se pasan a comisión para mayor estudio. Muy distinta la situación cuando los proyectos (ya sean de comunicación, de resolución o de ordenanza) los presenta y/o propone algún edil de la oposición, y más allá de si son importantes o no, son prácticamente todos rechazados. Y esto ya lo habíamos planteado, no les importa si dichos proyectos son o no importantes para la gente. Es más, si hasta para justificar ese rechazo se apoyan en excusas técnicas. Pero que en definitiva dejan la sensación de que la gente no estaría representada en lo más mínimo. Y prueba de esto, fue cuando en el último punto del Orden del Día del pasado jueves, el concejal de la oposición Nicolás Sonzini presentó un proyecto de comunicación, solicitando al DEM la inspección de un canal, continuación del canal Juan B. Justo, aquí en la ciudad de Vedia, ya que se encontraba (y encuentra) en su lecho, con una sustancia viscosa, y que podría llegar a ser toxica o no. Sonzini presentó fotos de 21 días atrás (fecha en la cual se había realizado la sesión anterior), por lo cual, los concejales oficialistas, por un lado adujeron que había pasado mucho tiempo y presentaron fotos de un canal completamente limpio, cosa rara, porque el día después de esta última sesión (22 días después de las primeras fotos), los concejales opositores volvieron a el canal y estaba con exactamente el mismo nivel de contaminación que antes. Y otra cosa que adujeron los concejales oficialistas fue que dicho proyecto no tenía que ser solicitados ni al Departamento Ejecutivo Municipal (ni a ningún área correspondiente local por no ser de su competencia), sino a quien correspondiera. Y con estos argumentos y después de arduas discusiones, el proyecto fue rechazado.
En definitiva: Por cuestiones técnicas o no, el proyecto de importancia y URGENCIA LOCAL se desaprobó; pero lo más importante y lamentable, es que el problema sigue estando (sin saber si esa sustancia en el lecho del canal es tóxica) y hasta puede ser peligroso para la vida de nuestros vecinos. Y da la sensación que solo se rechazó porque el proyecto fue presentado por el bloque opositor, cuando podría y puede comenzar a solucionarse el problema, y más allá de si le corresponde o no, si alguna persona de la Secretaria de Medio Ambiente Municipal, concurre al lugar, solamente con un par de guantes, un vaso o recipiente, toma una muestra de la sustancia en cuestión y la manda a analizar.
Párrafo aparte para las desprolijidades presenciadas durante la jornada tales como proyectos a tratar de los cuales a la oposición no se les había dado la información para analizar, razón por la cual algunos debieron ser retirados del Orden del Día por no saberse su contenido.
Lo volvemos a repetir y lo volvemos a preguntar, ¿de qué le estarían sirviendo al ciudadano del distrito estas reuniones de concejo, si la gente que los representa, por cuestiones que serían partidarias no le solucionan los verdaderos problemas?
Por el oficialismo kirchnerista, los concejales son: Cirella, Bogarín, Pagella, Flamini, Rivadeneyra, Morales y Grimaldi; mientras que por la oposición de cambiemos lo son Bróndolo, Cernik, Lorenzo, Gómez y Sonzini. Infórmese la ciudadanía porque algunos de ellos tienen pretensiones de presentarse a la reelección.
En definitiva y para ir cerrando, y haciéndome eco de varias consultas recibidas (por este cronista), una pregunta que se estaría haciendo la gente es, ¿para que se siguen realizando tan extensas, discutidas y en muchos lapsos bizarras sesiones, cuando se pueden solucionar los puntos a tratar de manera mucho más fácil, placentera y en menos tiempo? Se podrían sentar todos los ediles en una mesa de café (siempre respetando estrictamente los protocolos de la cuarentena establecida), presentar los puntos a tratar (sin ni siquiera discutirlos), y con una simple lapicera, marcar, casi todos los puntos presentados por el oficialismo (salvo alguno que pase a comisión), como aprobados; y todos los puntos presentados por la oposición (salvo alguno que pase a comisión), como rechazados. Es más, para hacerlo más completo, si quieren que haya un ganador y un perdedor, que los perdedores, PAGUEN EL CAFÉ.
NÉSTOR IRAOLA
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