En el día de ayer a la tarde, una vecina de Vedia, recibió un llamado desde ANSES, donde le comunicaban que le estaban por depositar los $10.000 del IFE. El requisito era que le pasen una cuenta para realizar este depósito.
La vecina debía concurrir al cajero, pasarle la cuenta con una serie de datos, entre los que incluía el DNI, el usuario y la contraseña de la cuenta. Por supuesto el llamado no era de ANSES, se trataba de una estafa que ya estaba en marcha.
Al confirmar que esa cuenta no tenia saldo, el estafador que imitaba un empleado de ANSES, le pedía otra cuenta porque el titular de esa cuenta tenía deudas. Así fue que la vecina solicitó a Mónica Cruzate que le facilitara su cuenta para poder cobrar los $10.000. Así se repetía la historia, incluso con una segunda vecina, que como no tenían saldo, “las cuentas de las dos amigas no servían porque las titulares tenían deudas”, decían los estafadores. En realidad, lo que no tenían era saldos.
Finalmente, un una tercera persona, que llamaremos “A” para nuestro relato, se solidarizó para prestarle su cuenta y recibir el depósito del falso ANSES, y acá si se empezó a efectivizar la estafa. La titular “A” de la tercera cuenta “no tenía deudas”, dijo el estafador, pero en realidad lo que tenía era $ 53.000 depositados. En un primer momento le depositaron $6.500, que pudieron ver incluso en la pantalla del cajero, pero necesitaban una nueva cuenta para depositar los $3.500 que faltaban, dijeron los estafadores.
De esta manera, se acercó un nuevo personaje en la historia, que llamaremos “B”, que ofreció su cuenta donde tenía depositada una importante suma de dinero por su trabajo de unos cientos de miles de pesos. Cuando ya estaba casi por terminar la estafa, casi a punto de pasar los datos de la última cuenta de “B”, fue cuando se dieron cuenta que ya no estaba los $53000 y los $65000 que se habían depositado hacía unos minutos en la cuenta de “A”.
De esta forma, se quedaron los estafadores con los $53.000 de la amiga “A” que había sido solidaria y facilitó su cuenta y sus datos para recibir el falso IFE.
La vecina estafada, que afectada por la pandemia aceptó recibir el IFE, ahora tiene una deuda con su amiga. Más tarde realizó la denuncia en la comisaría de Vedia.
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